miércoles, 10 de noviembre de 2010

SPEAK OUT

Alfredo Jaar, artista que nació en Santiago de Chile en 1956, utiliza principalmente la fotografía como registro y soporte de su temática, que gira en torno a las crisis geopolíticas y sociales de todo el mundo.

Jaar dice que su obra no se reduce a los espacios institucionales de arte, sino que busca ampliar su impacto a través del arte público y de seminarios intensivos de enseñanza en distintas instituciones, tanto académicas como comunitarias.

Se mantiene siempre fiel a un trabajo de compromiso con la historia, mencionando y mostrando al mundo hechos recientes, con el propósito de provocar reacciones ante algunas situaciones. Así, Jaar utiliza la fotografía como un método de plasmar problemas tan importantes hoy en día como las crisis, las relaciones de desigualdad entre los países ricos y tercermundistas, el conflicto de la inmigración, la violencia, el racismo.

Jaar dice que "La gente ha perdido la capacidad de conmoverse". Precisamente esto es lo que quiere evitar, haciéndonos ver la cara más dura de una realidad contemporánea a nosotros. No toca nada, solo calla, solo muestra, solo invita a que reflexionemos. Esta es su forma de hacer Arte. De una manera exclusivamente visual quiere impactar a la mirada del espectador. Quiere que oiga el trágico silencio que hallamos en las grandes tragedias. Y lucha por darle una voz, una trascendencia. Así, por ejemplo, en "The Sound of Silence", aparte del sonado vídeo que hace referencia a Kevin Carter, expone tres fotos en miniatura (de los retratos de 3 mujeres que han luchado por levantar a sus países y conseguir la paz) y las rodea de focos, de atención, de un reconocimiento que no poseen y que merecen.

Pero Jaar también se cuestiona el papel que tiene el periodismo. Más bien creo que es una crítica al periodismo y medios de comunicación. ¿Tiene que venir él a contarnos lo que nadie nos cuenta?¿A abrirnos los ojos? esto significa que algo falla...
Creo que de manera sutil se está riendo de la mala labor que hacen las personas que tendrían que informarnos. Y se coloca a sí mismo como sustituto irremediable de ello. La labor de un artista queda reducida en su caso a la recopilación, manipulación, unión de imágenes ya existentes. Hace una síntesis, o un análisis con ellas. Pero no es su creación. Su obra abarca aquí mucho más que la idea única que lo hace posible como arte.
Es, bajo mi punto de vista, una crítica al periodismo actual, que, para nuestra desgracia está completamente politizado y nos muestra la realidad por fragmentos e incompleta.

Sofia Corrales

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