Miedos, fuerza y nitidez

Paula Morán Ortín

"Origen" es una película de ciencia ficción estrenada en el año 2010 y dirigido por Christopher Nolan.

Narra la historia de Dom Cobb, un hombre especializado en la extracción de secretos del subconsciente lo que, unido a ser el principal sospechoso del asesinato de su mujer, le obliga a ser un fugitivo internacional. La oportunidad de retomar su vida vendrá de la mano de Saito, un influyente hombre de negocios, que para acabar Robert Fisher, su rival en el sector, encargará a Cobb y su equipo algo infinitamente más complejo que la extracción de un secreto, la inserción de una idea en el subconsciente del individuo. Los problemas surgen cuando, al introducirse en la mente de Fisher, el equipo de Cobb descubre que su preparación no previsto a Mal, la mujer de Cobb que pervive en su subconsciente y puede anticipar cada movimiento de este, Así, van adentrándose cada vez en niveles más profundos del sueño de Fisher, esquivando las defensas de este y las aristas del mundo de Cobb que aumentan conforme bajan de estrato, para hacer que el sujeto crea que la idea implantada es suya. Al final de la película se muestra a Cobb con sus hijos y el tótem de Mal, creando dudas sobre consiguió retornar a su vida o sigue dentro del sueño.

Destaca el hecho de que, en una película sobre lo onírico y llena de referencias a otros ámbitos como los cuadros de Escher y la filmografía de ciencia ficción (Blade Runner, Matrix, etc), no se haga alusión en ningún momento a Freud, el padre del análisis de los sueños. También queda algo descolgado el tratamiento de estos pues los sueños no suelen ser precisos, los lugares y las situaciones se intercalan y varían a velocidades inestables y nada resulta nítido.

Hablar de "Origen" es hablar de sueños, de su significado y de la posibilidad de penetrar en ellos pero, por debajo de esto, es hablar de miedo y fuerza. Cobb encierra a Mal en el fondo de su subconsciente (aludiendo al mito de Orfeo y la bajada a los infiernos) en una representación del temor a encararse a uno mismo, su culpa y sus miedos. Es hablar del miedo a quedarse atrapado en el Limbo y al contrario, pagar para encontrarlo y no volver porque la realidad nos asusta. Pero también es hablar de fuerza, de poder mental. De la capacidad del ser humano para seguir adelante no importa que pase y crear nuevos sistemas de defensa ante nuevos enemigos.

Así pues "Origen" interesa más por sus temas secundarios y lo que estos provocan en el espectador que por el argumento principal.